Robert De Niro ya había accedido a aparecer en la argentina ‘Nada’ y, antes, episodios de ‘Extras’ o ‘Rockefeller Plaza’, pero con ‘Día cero’ (Netflix, jueves, día 20) nos ofrece su trabajo más extenso en televisión hasta la fecha. Es un lujo poder seguirle durante seis horas en este tenso ‘thriller’ político, relato del via crucis del expresidente de Estados Unidos George Mullen, al que se encomienda una compleja misión. Sus tranquilas rutinas se van al traste después de que un devastador ciberataque desactive todo tipo de sistemas esenciales durante un minuto y provoque decenas de accidentes ferroviarios y de vehículos con miles de fallecidos. Según la actual presidenta, Evelyn Mitchell (Angela Bassett), él es el hombre adecuado para calmar los ánimos de la nación y liderar una comisión de investigación especial.
Hasta aquí podríamos creer que ya hemos visto esta serie: el (ex)presidente de Estados Unidos salva a su país y, por extensión, quién sabe, el mundo. Pero esta historia tiene otros pliegues, otras complicaciones. Se quiere dotar a la citada comisión de autoridad extraordinaria: permisos de vigilancia, de búsqueda y captura y, si es necesario, la suspensión del habeas corpus. Para la congresista Alexandra Mullen (Lizzy Caplan), hija del expresidente, algo así es simplemente “ultrafacha”. Por otro lado, pronto queda claro que quizá Brian Mullen no tenga las condiciones psicológicas y físicas idóneas para cargar con semejantes responsabilidades.
Parecidos razonables
¿Un hombre con mucho poder de cuya agudeza mental empieza a desconfiarse? ¿Una exploración de los peligros del poder absoluto? Se diría que Biden y Trump estaban en el tablero de inspiraciones para esta serie. “Pero no fue así realmente”, asegura Eric Newman, cocreador de ‘Día cero’ y, antes, las populares ‘Narcos’ o ‘Griselda’. “Todos estos proyectos llevan mucho tiempo. Cuando estábamos escribiendo, los problemas de agudeza de Biden ni siquiera se discutían públicamente. De lo que queríamos hablar era, sobre todo, de nuestra relación con la verdad como civilización. De cómo antes existía una verdad objetiva y ahora existen dos verdades irreconciliables que, de algún modo, han de coexistir“.
Otro de los creadores de ‘Día cero’, Noah Oppenheim (expresidente de NBC News y guionista de ‘Jackie’), recuerda el importante papel de las historias compartidas por el periodista Michael S. Schmidt, ganador de dos premios Pulitzer en 2018, uno de ellos como parte del equipo que cubrió las investigaciones sobre Trump para el ‘New York Times’. “Nos conocemos desde la escuela primaria”, dice Oppenheim sobre su amistad con Schmidt, también acreditado como creador. “Cuando yo trabajaba en NBC News y él ya había entrado en el ‘Times’, solíamos hablar mucho sobre tendencias que nos preocupaban, como la fractura de la verdad o la relación entre tecnología y democracia. Nos interesaba mucho también una historia que algunos periodistas perseguían en aquel momento: alguien que estaba participando en unas investigaciones determinantes para el país parecía haber caído en un cierto declive cognitivo [dice sin querer nombrar, probablemente, al fiscal especial Robert Mueller, encargado de la investigación sobre la presunta injerencia rusa en las elecciones de 2016]. I was in charge of a significant task and seemed unable to separate the real from the false. We put all these elements to cook in a pot to create this fictional story. ”
Si hay algo que los creadores querrían que los espectadores sacaran en claro de ver la serie, es la necesidad de recuperar la verdad moral: “Incluso si no sabemos diferenciar entre lo que es real y lo que es no, es fácil saber lo que es lo correcto”, opina Newman. “Eso es lo que todos queremos de nuestros líderes: sacrificio personal, reflexión, capacidad para tomar las decisiones adecuadas, aunque estas tengan un precio político”.
Con iconos de las series
El antiguo Travis Bickle está, como se puede esperar, excelente como ese presidente querido por todos, con apoyos en ambos partidos, pero no sin sus misterios: cuando tenía un segundo mandato asegurado, retiró su candidatura, en principio por el dolor de haber perdido a su hijo. De Niro se sumó al proyecto muy al principio de su génesis. Explica Newman: “Noah y yo tuvimos nuestra primera conversación a finales de otoño de 2021. Sobre una semana después, tuvimos una reunión con De Niro, le comentamos la historia y él respondió a ella de inmediato. Igual que nosotros, lo veía como una forma de explorar nuestra relación actual con la verdad”.
De Niro no es el único gancho de un reparto numeroso y estelar en el que brillan, por ejemplo, Jesse Plemons (‘El irlandés’, ‘Los asesinos de la luna’) como misterioso perrito faldero del expresidente; Lizzy Caplan como su hija Alexandra, “un personaje arrogante pero cargado de profunda tristeza”, según dice la propia Caplan a EL PERIÓDICO, o Dan Stevens como el presentador televisivo convertido en su azote, aunque sea él mismo quien merezca críticas por ser “un falso hombre del pueblo con una mansión gigante”, en definición del actor que le interpreta.
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Lizzy Caplan (Alexandra Mullen) in an image of 'Zero' Day / Netflix
Tanto Stevens como Caplan conocen bien la narrativa serializada. El primero se dio a conocer internacionalmente como el Matthew Crawley de ‘Downton Abbey’; la segunda, como parte del revelador reparto de la comedia de instituto de culto ‘Freaks and geeks’. “A pesar de tener más experiencia en el medio, estábamos tan desbordados como De Niro en el trabajo”, avisa Stevens. “Un proyecto así puede alargarse y exigir mucho. Robert parecía hundido con ello, pero a todos nos acabó animando la energía de Lesli Linka Glatter [‘Twin Peaks’]which directed the six episodes and is a machine. ”
Según Caplan, conocida también por ‘Masters of sex’ y ‘Fleishman está en apuros’, la producción de series “se está contrayendo”, lo que no necesariamente ha de ser malo. “Hubo un tiempo en que había casi demasiadas. Y de acuerdo, más contenido significa más oportunidades, pero también era un poco triste no saber si alguien iba a ver aquello en lo que habías trabajado tan duramente. Ojalá ahora todo se quede en un punto medio saludable”.